El vino es uno de os muchos productos que podemos incluir entre las tendencias vintage, porque el vino también puede serlo y aunque no se tenga demasiada idea sobre su cosecha, elaboración o cuidado, prácticamente todo el mundo sabe reconocer cuándo un vino es bueno o no.
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de adquirir un vino vintage?
Un buen vino es toda una tentación para quien le guste, pero hay que seguir una serie de pautas para que lo que compremos nos ofrezca un mínimo de calidad. Además de los tradicionales centros comerciales, podemos optar por ir a una tienda de delicatesen o a una vinatería especializada en buenos caldos.
Jamás debemos elegir la botella o botellas que hayan estado en un escaparate dado que seguramente habrán estado expuestas a la luz solar y al calor, lo que podría haber arruinado sus cualidades y no ser tan bueno como debería serlo.
Si se tiene la oportunidad de revisar el corcho, no hay que dudar en hacerlo. Si éste está pegajoso, cuarteado o de un color extrañamente oscuro, lo mejor es no comprar ese vino porque puede que esté estropeado.
Si una botella ha estado bien conservada puede que tenga polvo, pero jamás debe tenerlo por los hombros o por la zona del bocal, dado que esto revelará que ha sido guardada en posición vertical, cuando la mejor forma de conservación es en horizontal así como en ausencia de luz y con una temperatura y humedad controladas.
Otro aspecto que debemos tener en cuenta a la hora de elegir un vino es ver la añada y su etiqueta o etiquetas, con lo que sabremos diferentes datos del vino como año, uva usada, bodega, etc. pero también si el vino ha sido conservado correctamente. Es normal que la etiqueta pueda estar amarilleada por el efecto del tiempo, pero eso es algo completamente normal.
Si no queremos arriesgarnos, podemos anotar todos los datos de la botella y buscar opiniones por Internet, con lo que obtendremos un buen feedback sobre si la elección que hemos hecho es la correcta o no.
Para finalizar os dejamos con una cosa que debéis tener siempre presente, no siempre lo más caro es lo mejor. Puede que encontremos una botella del año 1973 que nos resulte tentadora, pero hay que buscar información sobre si la cosecha de esa bodega en aquel año fue buena, porque no siempre lo es y en estos casos… lo mejor es asegurarse.
En casa nos encantan los vinos vintage, los compramos en la vinatería del Sr. Julián, que lleva años con su bata detrás del mostrador y nos recomienda siempre lo mejor. Solemos disfrutarlos con los amigos o mejor, mi mujer y yo solos con una buena cena. Muy buen artículo.